Escritores ilustres querian demostrar que ni siquiera el nombre de América era nuestro y que habría surgido del navegante florentino Albérico Vespucio. Ahora sabemos que Américo Vespucio no era Américo y que América es lo único realmente nuestro, puro y autóctono. abriéndole las puertas a la verdad podemos afirmar que proviene de Amerrique voz de un dialecto de las cordilleras centrales de Nicaragua, del tronco linguistico lenca-maya, que quiere decir “La tierra donde sopla el viento” De allí donde venía a sustraer el oro don Albérico salió América ; Desde “Sierra de Amerrique” Y eran tantos los viajes de Vespucio que sus coterraneos lo rebautizaron “Américo”. Prueba de ello es que ni siquiera figura en el santoral. Bib. “AMERRIQUE” Los Huérfanos del Paraíso- Danilo Antón
Escritores ilustres querian demostrar que ni siquiera el nombre de América era nuestro y que habría surgido del navegante florentino Albérico Vespucio. Ahora sabemos que Américo Vespucio no era Américo y que América es lo único realmente nuestro, puro y autóctono. abriéndole las puertas a la verdad podemos afirmar que proviene de Amerrique voz de un dialecto de las cordilleras centrales de Nicaragua, del tronco linguistico lenca-maya, que quiere decir “La tierra donde sopla el viento” De allí donde venía a sustraer el oro don Albérico salió América ; Desde “Sierra de Amerrique” Y eran tantos los viajes de Vespucio que sus coterraneos lo rebautizaron “Américo”. Prueba de ello es que ni siquiera figura en el santoral. Bib. “AMERRIQUE” Los Huérfanos del Paraíso- Danilo Antón